lunes, 12 de junio de 2017

Llegada al Parador Nacional las Cañadas del Teide.


Parada para descansar los motores después de una dura subida.


Aparte de los motores, el cuerpo también necesitaba urgentemente un refresco.


Mientras descansábamos, disfrutamos de la increíble vista del mar de nubes...


Así realizamos un organizado picnic en las faldas del Teide.


Ya con la barriga llena, la alegría se nos nota en la cara.


Una vez realizada esta parada, continuamos la subida en dirección al Parador Nacional de Las Cañadas del Teide.


A esta altura, el paisaje es totalmente diferente.


Paso a paso, continuamos el ascenso.


Segunda parada del día, es increíble lo bien que responden estos abueletes en una prueba tan dura como esta.


A continuación, nos dirigimos al comer a un restaurante en el Portillo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario